viernes, 12 de enero de 2024

 

 

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UN TAL EPSTEIN

 El hecho de desenmascarar importa más que las intenciones del que desenmascara (G. Lukács)

 

 

 

 

Caitlin Johnstone:

 

“…Si todavía apoyas a Israel en este momento, simplemente le estás diciendo a todo el mundo que no te importan la verdad ni la moralidad. Estás anunciando al mundo que sólo te importan tus extrañas agendas ideológicas y tu control geopolítico.

 

Estás proclamando públicamente que eres un ser humano de mierda. Que has vivido en esta tierra todos estos años sin llegar a ningún nivel de madurez emocional o psicológica. Que has desperdiciado tu vida en este planeta.

 

Espere hasta que los Zoomers se den cuenta de que Epstein hizo lo que hizo porque estaba dirigiendo una operación de chantaje sexual para la inteligencia israelí.

 

El aspecto más significativo de la historia de Epstein no es que ayudó a algunos personajes famosos a violar a menores, sino que poderosas agencias de inteligencia utilizan niños esclavos sexuales y chantaje sexual para ejercer control sobre nuestra sociedad…”

 

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JEFFREY EPSTEIN Y SU MÁGICA ISLA DEL PODER

 

Oleg Yasinsky

 

 

Desde hace tiempo pienso, que, para descifrar los mensajes noticiosos de los grandes medios del sistema, como mínimo, hay que aprender a ser malpensados. Uno de los problemas sin resolver de este momento, es que el lenguaje que manejamos ya cada vez nos sirve menos para describir los hechos de la nueva realidad que enfrentamos.

 

Por ejemplo, de nada nos ayuda el término 'perverso' si queremos entender el fenómeno de Jeffrey Epstein y su "isla del pecado", la que antes se desconocía bajo el nombre de 'Little Saint James Island', un campo de concentración para niñas y adolescentes, convertidas en juguetes sexuales para los seres inhumanos adultos: los poderosos que iban a la isla para demostrar y ejercer su poder sin límites, como si no tuvieran pruebas suficientes de aquello, en su entorno cotidiano.

 

Desde la parte más pobre de mi imaginación, se me ocurre, que en un mundo donde todo es transable a un equivalente monetario, las mentes enfermas, pequeñas y necesitadas de uno u otro servicio carnal, que, si además son de multimillonarios, podrían acceder fácilmente a la realización de sus fantasías carnales con su lógica libremercadista, a la que tanto admiran. ¿Por qué extraña razón su verdadero placer debe suponer el dolor, sufrimiento, torturas o incluso la muerte de seres totalmente indefensos?

 

Sin caer en el morbo nauseabundo de los hechos sucedidos durante 17 años, desde el 2001 y hasta el 2018, en su isla paradisiaca, a donde cientos de vuelos privados le llevaban a las ilustres visitas y a sus víctimas, no podemos ser tan ingenuos como para no entender que hablamos de la punta del iceberg, descubierta por supuesto, no por una casualidad o tal vez, hasta con la intención de distraernos de algo aún mucho más grave.

 

El mar del capitalismo salvaje que baña nuestros continentes seguramente esconde miles de otras islas, iguales a la de Epstein o mucho peores, cumpliendo la sagrada ley de la oferta y la demanda, tierra o mar adentro

 

El gran Pier Paolo Pasolini en su última película 'Saló o los 120 días de Sodoma' mostró cómo el fascismo manipula y domina la psicología humana a través del sexo y la perversión. Cuentan, que cuando la cinta salió a mediados de la década de 1970, sus imágenes hacían vomitar o salir corriendo a sus espectadores. El problema de hoy, es que al lado de la realidad que viven cotidianamente varias de nuestras sociedades, reflejado en sus infalibles crónicas amarillistas, esta película ya se ve como algo bastante inocente. ¿Se habrá inspirado Epstein para reproducir algo de 'Saló' en su isla? ¿O la película no es más que un breve retrato psicológico de las mentes descompuestas por un poder absoluto? En todo caso, 'Saló' es la mejor descripción cinematográfica de lo que pasaba en esta isla del Caribe, varias décadas después de su rodaje.

 

Ahora se publican listas de los gobernantes y famosos que fueron visitantes de la isla del multimillonario pedófilo torturador. Seguramente no todos están involucrados en los delitos y tal vez varios de ellos no tenían cómo saber los secretos del lugar. Claro que por las selváticas leyes del 'mundo civilizado', sus rivales políticos, faranduleros y comerciales, ahora harán todo lo posible para hundirlos. Eso es lo que menos importa. Lo que importa es que la bestial concentración del poder y dinero en manos groseras y primitivas, está convirtiendo a nuestro planeta en una sucursal de su "isla del pecado", donde todos nuestros mundos humanos son reducidos a la única función de proveerles riquezas, vírgenes y esclavos.

 

Esta élite fascista reinante y que impone todas las políticas globalistas, que disfrazan de progreso para normalizar su amoralidad, no solo sexual sino la de su hambre desmedida de poder, y que en su afán depredador nos arrastra a la pérdida de la personalidad, uniformándonos a todos bajo un mismo discurso, un mismo gusto estético, una misma violencia, una sola sexualidad y una sola perversidad. Eso es el fascismo. Romper los límites humanos destrozando los parámetros éticos, y quien se atreva a cuestionarlo, satanizarlo como moralista ultraconservador patriarcal, tratando de convertir lo ético en un sinónimo de reaccionario y retrógrado.

 

Si alguien cree que estoy exagerando, revise por ejemplo las ofertas turísticas de las últimas décadas en Colombia, que, junto a los avisos comerciales, han sido parte de la crónica policial. Los seres no humanos menos poderosos que el señor Epstein, o menos multimillonarios o simplemente los que no tuvieron la suerte de ser parte de su círculo de 'privilegiados' contactos, siempre podían disfrutar de todo, abusando de niñas o niños de cualquier edad, incluso torturando impunemente a sus pequeños juguetes sexuales. Colombia es el ejemplo más cercano geográficamente a la famosa isla. Insisto, son decenas de países y cientos de islas. No se trata de ninguna excepción, es una norma de nuestros tiempos.

 

Pero hay un tema que no se suele tocar en los numerosos análisis sobre el escándalo. Tal vez, el tema central. ¿Qué le pasa al ser humano del siglo XXI? ¿De qué nos sirvieron todas las bibliotecas, todos los museos, todas las partituras y todas las tecnologías, lo creado y acumulado por nuestras generaciones hasta ahora, si al primer pedido de cualquier bestia dotada de dinero y poder, en pocos minutos despega un jet cargado de niños esclavos y aterriza en las coordenadas, en cualquier horario requerido, según la orden del servicio solicitado?

 

Y volviendo a la solicitud inicial de ser malpensados. ¿Destapando el morboso y pintoresco escándalo con la isla de Jeffrey Epstein, de qué tema más grave nos están distrayendo? ¿A qué grupo político estadounidense quieren perjudicar antes de las elecciones? ¿Cuántos lectores de la prensa serán capaces todavía de pensar que hay alguien allá muy arriba, entre las nubes, realmente indignado por los horrendos crímenes de su gente en la pintoresca isla del Caribe?

 

 

Completo aquí:

https://esrt.press/opinion/oleg-yasinsky/495109-jeffrey-epstein-magica-isla-poder

 

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LO QUE EPSTEIN SIGNIFICA

Craig Murray

Lo fascinante de lo que las redes sociales denominan "la lista de clientes" de Epstein es que ninguna de las personas que ahí salen parecieran ser sus clientes. No he visto a nadie decir "conocí a Epstein porque administraba mis finanzas". Ni tampoco parece haber alegato alguno de que la gente le pagaba por sus servicios.

¿Qué está pasando entonces?

Solemos caer en la trampa de intentar ofrecer una descripción de lo que en realidad pasó, y luego defender cada laguna, cuando en realidad todo lo que tenemos que hacer es señalar es lo absolutamente alocada que en realidad es la historia oficial. La teoría de la conspiración más demente y extrema en la saga Skripal es la versión oficial. No sé exactamente qué era lo que estaba pasando, pero sé que no es eso.

Es igual con Epstein. Lo describen como un "financista", ¿pero qué es lo que alguna vez financió? ¿Cuál es la fuente de su riqueza?

Los activos de Epstein valían alrededor de 600 millones de dólares. Estos incluían no una sino dos islas caribeñas y las muy sustanciales propiedades en ellas. Incluyen mansiones muy reales en Nueva York o Palm Springs.

Pero no sólo hay que ver el capital que acumuló: hizo esto mientras también estaba gastando a una velocidad colosal, con un estilo de vida más común en un billonario que en un millonario. Tenía mucho personal ejecutivo, y sus residencias estaban completamente dotadas de empleados. Tenía guardaespaldas. Mantenía un jet privado. Trató a sus amigos profusamente con obsequios y hospitalidad, y mantuvo esclavas sexuales. ¿Cómo siguió llegando todo ese dinero?

Si se ve a otras figuras similares, como el altamente entretenido Allen Stanford o el Bernie Madoff de mayor escala, se puede ver de dónde provenía el dinero. Existe un banco o una casa de inversiones situados en un edificio físico, con personal real y muchas computadoras. Hay inversionistas agraviados muy reales. ¿Quiénes son los inversores de Epstein?

La respuesta estándar parece ser Leslie Wexner, ex CEO de Victoria's Secret, cuyas finanzas Epstein sí administró en algún punto y que supuestamente una vez le dio un poder legal limitado a Epstein. Pero a menos que Epstein le robase a Wexner un buen 10% de su valor neto, eso no explica el aumento mágico de sus riquezas. No antes de 2019, 32 años luego de que Epstein comenzara a administrarle los fondos a Wexner, y once años después de haber dejado de hacer, existe afirmación alguna de Wexner sobre que Epstein le robase los fondos, y luego aparece un movimiento de distanciamiento en vez de una acusación seria. También vale la pena señalar que Wexner le vendió a Epstein su mansión, no se la obsequió, como he visto falsamente reseñado.

Una tarifa típica en la administración de riquezas es de un 1%, por lo general el porcentaje es sustancialmente menor cuando las sumas manejadas en una cuenta individual son muy altas. Si evaluamos el costo anual del personal al servicio de Epstein y su estilo de vida ostentoso alrededor de los 20 millones de dólares -cifra muy conservadora- Epstein podía haber estado manejando miles de millones de dólares para mantenerse funcionando, ya no digamos acumulando su propio capital sustancial.

Sencillamente no hay evidencias de que Epstein efectivamente tuvo una compañía que administrara esa clase de fondos. ¿Dónde está la compañía? ¿Dónde sus registros? ¿Quiénes son los clientes?

En el caso de Assange, sabemos que la CIA buscó al billonario del juego Sheldon Adelson para que organizara y financiara el espionaje a Julian en la embajada a través de UC Global, una compañía de seguridad sospechosa que también estuvo implicada en actividades ilegales para la agencia en América del Sur (que actualmente están legalmente prohibidas su divulgación)

Los servicios secretos sí operan a través de los turbios hombres de negocios del mundo. Esto no es una conjetura: es un hecho sencillo.

Que Epstein fuese capaz, simplemente mediante gastos de hospitalidad extravagantes, de tentar a tantos en su "lista de clientes" para que disfrutasen de ella díficilmente es una sorpresa. Que la oferta incluía sexo con muchachas notablemente jóvenes parece indiscutible. Esto, obviamente, aumentaría el nivel de influencia de Epstein sobre aquellos que aceptaron la oferta. Creo que es errado considerar esto como un esquema de chantaje, es algo más sutil que esto: un vínculo compartido de complicidad, con un sobresalto de peligro subyacente.

El riesgo a exponerse en una relación de este tipo, por supuesto, es mutuo. No hace falta discutirlo. Si lo que Epstein estaba haciendo era algo tan sutil como extorsión hablada, lo habrían matado mucho antes de lo que efectivamentelo hicieron, dado los involucrados. Aquellos que seriamente amenazaron la reputación de los Clintons, por ejemplo, han sido extraordinariamente propensos a accidentes o suicidios.

Que los servicios de seguridad tanto de Israel como de Estados Unidos asistieron esta actividad de financiamiento parece ser totalmente probable, y una explicación muy sencilla de ese gasto basante alejado de la fuente aparente de ingreso. Epstein parace haber sido un excelente "agente de influencia", un gasto más que bien vale la pena, visto desde el punto de vista de estos Estados.

Una pregunta muy sencilla. ¿Cuántas de estas figuras poderosas en la "lista" alguna vez intentaron ejercer algún tipo de influencia para aliviar el sufrimiento trágico de los palestinos o actuaron en contra de los intereses de Israel?

A veces, el mayor conocimiento proviene de las preguntas más sencillas.

 

 

Craig Murray es un escritor, activista de los derechos humanos y ex diplomático escocés.

 

Fuente:

https://misionverdad.com/traducciones/lo-que-epstein-significa

 

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